Reproducción al óleo de «Paseo a orillas del mar»
Hoy os traemos la reproducción de un icono de Sorolla, uno de los cuadros más famosos del artista, si no el que más, «Paseo a orillas del mar».
Esta obra es una reproducción que hemos realizado en Copiamuseo multitud de veces, pero no la habíamos subido nunca al blog para que nuestros clientes y amigos puedan encontrarla en el buscador.
Esperamos que la disfrutéis.
Reproducción «Paseo a orillas del mar«, de Sorolla 1909, «Museo Sorolla»
Como os hemos dicho anteriormente hemos pintado esta obra muchas veces y en diferentes medidas, pero ésta precisamente es la más pequeña que hemos realizado, tiene 62 x 60 cm.
Ya veis que es casi cuadrado, Sorolla sitúa a los personajes en el centro del lienzo de izquierda a derecha, aunque ligeramente subidos, incluso el personaje de la izquierda tiene el sombrero cortado, no tengo muy claro porqué.
Cromáticamente veréis que los azules del mar y los naranjas de la arena, son totalmente complementarios, muy bien escogidos los azules y violetas.
Aunque lo importante son los blancos del vestuario de los personajes, con una gama de tonos fantástica.
Con respecto a la pincelada es, muy ágil y suelta y en algunas zonas de esta obra utiliza mucha textura.
Una preciosidad de cuadro y una de las obras más importantes de Sorolla.
La obra original
El original se encuentra en el «Museo Sorolla», en Madrid y tiene unas medidas de 205 x 200 cm y es del año 1909.
Los personajes son su mujer, Clotilde y su hija mayor María que vestidas de blanco, son acariciadas por la brisa de la playa de Valencia.
Esta obra es una de las más importantes de su etapa de culminación, que comprende los años 1900 a 1910.
En este momento, Sorolla ya había ganado reconocimiento y fama tanto en España como en el extranjero.
Su estilo distintivo, caracterizado por el uso de pinceladas sueltas y una paleta de colores brillantes, le había valido el apodo de «el pintor de la luz».
Sus obras retrataban escenas de la vida cotidiana, paisajes, retratos y temas históricos, capturando la belleza y la luminosidad de su entorno.
En 1909, Sorolla realizó una exposición individual en la Hispanic Society of America en Nueva York, donde presentó una amplia selección de sus pinturas.
Esta exposición fue muy exitosa y le dio aún más reconocimiento en Estados Unidos.
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